Temecula: el otro vino de California
Cuando se habla de los vinos de California, Napa y Sonoma acaparan la atención. Por suerte, el estado dorado es enorme y el sur también sabe de enoturismo. Temecula, a medio camino entre Los Ángeles y San Diego, sorprende a las visitas con clima mediterráneo, productos orgánicos y medio centenar de viñedos.
Valle de Temecula visto desde un vuelo en globo aerostático con A Grape Escape.
En 1976 los vinos de California derrotaron a los vinos de Francia en una competencia que pasó a la historia. La prueba a ciegas, conocida como “el juicio de París”, marcó un hito en el mundo de la enología. Desde entonces, con el pesar colonial del Viejo Mundo, la procedencia de un vino no basta para juzgarlo con favores y estigmas. Bueno, en teoría no basta.
Los valles al norte de la bahía de San Francisco dieron una lección de humildad a los viñedos europeos. Luego, siguieron sus pasos. La región vitivinícola de la Costa Norte, que incluye Napa y Sonoma, acapara la atención cuando se trata de vinos californianos. Una tregua tácita perdona a las regiones vecinas de la Costa Central y el Valle Central, pero no a la Costa Sur.
Como una suerte de patito feo, el sur de California produce vino. Buen vino, de hecho, pero vino que se pierde entre playas soleadas, mansiones faranduleras y parques temáticos. En el condado de Riverside, entre Los Ángeles y San Diego, un valle con clima mediterráneo y saberes agrícolas prueba que los vinos de la Costa Sur no son ningún premio de consolación.
Entre montañas semidesérticas y granjas sostenibles, Temecula presume viñedos familiares, cocinas orgánicas y vinos premiados con medallas de oro. A cambio de sacrificar postales costeras, la carretera interestatal 15 conduce a un valle donde los placeres dionisiacos y el enoturismo son cosa de todos los días. Por los vuelos en globo aerostático, por las vendimias y por los restaurantes de Old Town Temecula… ¡salud!
Recorrido por el viñedo Masía de la Vynia.
Vista de los viñedos de Temecula desde un globo aerostático.
Enoturismo en Temecula:
Los vinos del sur de California
El valle de Temecula, en la región vitivinícola de la Costa Sur de California, vive de la fertilidad de sus suelos. Gracias a un microclima caracterizado por días calurosos y soleados con noches frescas y brumosas, Temecula cuenta con medio centenar de viñedos. Algunos son instituciones con décadas de vida y devoción por los métodos conservadores, otros son experimentos con etiquetas irreverentes y medallas inesperadas.
¿Qué viñedos visitar en Temecula? Por qué no probar un poco de todo. Esta lista contempla desde bodegas familiares discretas hasta viñedos institucionales con hoteles de lujo y spa. Eso sí, para llegar de un lugar a otro hace falta manejar y la carretera no es la mejor amiga de Dionisio. En ausencia de transporte público, un recorrido por los viñedos de Temecula requiere un conductor designado.
AKASH WINERY
La historia de este viñedo familiar comienza en 2010, cuando los Patel compran cerca de ocho hectáreas de tierra en el valle de Temecula. Con la ayuda de Renato Sais, enólogo mexicano originario de Sonora, Akash produce alrededor de 37 mil botellas al año. Bajo la marca Akash Estate, el viñedo produce zinfandel, petite sirah y cabernet sauvignon con el fruto de las vides familiares. Askash ofrece recorridos privados que incluyen visita al viñedo y degustación de hasta seis vinos.
FAZELI CELLARS
Luego de una vida de hacer dinero con la producción de infomerciales, B.J. Fazeli decidió rendir tributo a su origen iraní con un viñedo inspirado en el calendario y los vinos persas. ¿Por qué en Temecula? Bueno, por azares de un viaje familiar y el hallazgo de una colina con vistas envidiables. Así nació Fazeli, un viñedo devoto de los ensambles con shiraz. En su cava monumental, construida con materiales reciclados, Fazeli presume blancos, rosados, tintos y vinos de postre. El viñedo ofrece degustaciones, recorridos privados y un restaurante que fusiona recetas persas con ingredientes del campo californiano.
Renato Sais, enólogo de Akash Winery.
Sala de degustación de Fazeli Cellars.
MASÍA DE LA VYNIA
Este viñedo boutique, sin tapujos, se declara devoto de la cultura y de los vinos españoles. De ahí su nombre catalán y su apuesta por varietales como tempranillo, garnacha y monastrell. Aunque la influencia ibérica es evidente, Masía de la Vynia no está casada con la hispanidad. De hecho, es uno de los pocos viñedos en Temecula que hacen malbec con sus propias uvas. Entre vides y colinas, la bodega abre sus puertas al público en general y ofrece degustaciones sin cita y catas privadas con maridaje.
PALUMBO FAMILY VINEYARDS
El viñedo Palumbo, como dice el nombre, es un viñedo familiar. Fundado a finales de la década de 1990, el proyecto tiene como objetivo producir vino con procesos artesanales y sostenibles. Con poco más de cinco hectáreas plantadas, Palumbo produce 2,500 cajas de vino desde cero. Nicholas Palumbo, fundador, enólogo y viticultor del viñedo, tiene como principio solamente producir vino con uvas que él y su equipo plantan, cuidan y cosechan. Palumbo Family Vineyards ofrece degustaciones y recorridos guiados.
SOUTH COAST WINERY
South Coast Winery es un hotel de lujo con spa, tienda y restaurantes. También es un viñedo familiar serio: el segundo más grande de Temecula y uno de los que más vino produce en la región. South Coast utiliza sus propios frutos, provenientes de diferentes viñedos, para hacer vino con más de 15 variedades de uva. Con certificación sostenible y más de tres mil reconocimientos nacionales e internacionales, los enólogos Jon McPherson y Javier Flores ponen el nombre de la región vitivinícola de la Costa Sur californiana muy en alto. South Coast Winery ofrece degustaciones, restaurante y mucho espacio en sus más de 25 hectáreas de terreno.
Uvas listas para la vendimia en Masía de la Vynia.
Jardines de South Coast Winery Resort & Spa en Temecula.
Granjas y mesas:
Agricultura y cocina en Temecula
No es casualidad que el buen vino vaya de la mano con el buen comer. A menudo, los suelos fértiles que producen las mejores uvas para hacer vino producen también vegetales y especias que hacen maravillas en la cocina. Como Avensole Winery, otros viñedos en el valle ofrecen menús pensados para maridar sus productos. Y muchos restaurantes locales ofrecen, por supuesto, los vinos que ponen a Temecula en el mapa. Dionisio aparte, no todos los festines giran en torno al vino.
Una vuelta por Old Town, como se conoce al centro de Temecula, basta para encontrar desde sushi y lasaña hasta hamburguesas y mac ’n’ cheese. En Espadín, un restaurante de cocina mexicana, los tacos de carnitas y las enchiladas suizas se pueden acompañar con mezcal, tequila y margaritas. Y a un par de cuadras, la tienda de Temecula Olive Oil Company presume una docena de variedades de aceite de oliva local. La compañía, fiel a los principios de la agricultura regenerativa, ofrece pruebas de sus productos y visitas a los olivares.
Escondido en una plaza al final de la calle principal, EAT Marketplace ofrece desayuno y comida. Más que casarse con un tipo de dieta o de cocina, la chef Leah Dibernardo se compromete con la filosofía de la trazabilidad de los productos. En este café si alguien quiere saber de dónde vienen los ingredientes de la dona de limón con semillas de amapola o de la hamburguesa de ñame con tahini, solo tiene que preguntar. En una de esas, la respuesta incluye una visita a una granja local donde la producción de insumos naturales y la regeneración del ecosistema van de la mano.
Leah (EAT Marketplace) y Cory haciendo comunidad con proyectos de agricultura regenerativa en Temecula.
Dona de limón con semillas de amapola, dona vegana de fresa y dona keto de canela en EAT Marketplace.
Tips de viaje:
El aeropuerto de San Diego, 97 kilómetros al sur de Temecula, recibe vuelos de varias ciudades de Norteamérica y Europa. El aeropuerto de Los Ángeles, 150 kilómetros al noroeste, recibe vuelos de Bogotá, Lima, Madrid, Santiago de Chile y varias ciudades en México y Centroamérica.
Desde México, volar al aeropuerto de Tijuana y cruzar la frontera por el CBX (Cross Border Express) es una alternativa que suele ser más barata. Solamente los pasajeros con vuelos en Tijuana pueden utilizar este servicio.
El clima en Temecula es mediterráneo, con diferencias de temperatura sustanciales entre el día y la noche. El invierno es lluvioso con temperaturas entre 4 y 22 °C y el verano es caluroso con máximas que suelen rebasar los 30 °C.
Una de las actividades icónicas de Temecula es viajar en globo aerostático. A cambio de madrugar, los vuelos ofrecen las mejores vistas panorámicas del valle y de las montañas de San Jacinto. A Grape Escape ofrece viajes de alrededor de una hora que incluyen un brindis con vino espumoso local.
En Temecula no solo se produce vino. Cerca del centro, Refuge Brewery ofrece alrededor de veinte variedades de cerveza artesanal de barril como Blood Orange (una wit de naranja roja), Baja Crush (una ipa sin filtrar) y Vossenbes (una cerveza navideña estilo saison con arándanos y canela).
Curiosidades:
La película Bottle Shock está basada en hechos reales y cuenta la historia de la competencia de 1976 en la que los vinos de California vencieron a los vinos de Francia.
Temecula es la adaptación colonial española de la palabra temecunga. El término original fue acuñado por el pueblo payomkawichum y significa “lugar del sol”. En español el nombre se encuentra con y sin tilde: Temécula y Temecula.
Viticultura y vinicultura no son sinónimos. Viticultura obedece al cultivo de la vid y vinicultura a la elaboración del vino. Vitivinicultura involucra los dos procesos.
En la competencia de vinos de la Feria Estatal de California, solamente South Coast Winery Resort & Spa ha sido reconocido como viñedo del año en cuatro ocasiones.
El casino más grande de California está en Temecula, específicamente en las tierras de la tribu Pechanga del pueblo payomkawichum.
PIES DE FOTO
1. Vista de los viñedos de Temecula en un vuelo en globo.
2. Coliflor crujiente con reducción de granada y pan con aguacate, rábano y pepitas en Avensole Winery.
3. Degustación de sauvignon blanc en el viñedo de Akash.
4. Donas con ingredientes trazables en el café EAT Marketplace de Temecula.
5. Viñedos de South Coast Winery Resort & Spa.
6. Degustación de cerveza artesanal de barril en Refuge Brewery.
7. Uvas a punto de vendimia en Masía de la Vynia.
8. Granja sostenible en Temecula, región vinícola del sur de California.
9. Coyote silvestre en los viñedos de Masía de la Vynia.
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Publicado el 11 de enero de 2021 por Marck Gutt | Don Viajes.
Última actualización: 11 de enero de 2021.
El contenido de esta publicación es resultado de un viaje realizado con el apoyo de Visit California y Visit Temecula Valley.
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