¿Qué hacer en Tijuana? CECUT, Telefónica Gastro Park y lugares para visitar
Entre museos, playas y restaurantes, sobran cosas que hacer en Tijuana. Vecina de San Diego, la ciudad más poblada de Baja California se luce con una oferta de atractivos curados. La cartelera del CECUT, la propuesta de Telefónica Gastro Park y las cervecerías artesanales de avenida Revolución son solo algunos de los lugares para visitar en TJ.
Tijuana tiene una fama injusta. En el mejor de los casos, por poco más que tequila, sexo y marihuana. En el peor, por coyotes de dos patas y muros cada vez más altos. Solo el legado de artistas como Julieta Venegas y Nortec logran quitarle a su ciudad algo del mal augurio que tiene en el imaginario colectivo. Por suerte, los prejuicios son solo eso.
Con dos millones de habitantes, Tijuana defiende el título de la quinta ciudad más grande de México. Su historia y su crecimiento son consecuencia directa del coqueteo fronterizo, pero no todo lo que pasa al sur de la garita son promesas de sueño americano. Armada con espíritu emprendedor y un friego de anglicismos, la ciudad se luce con decenas de cosas que hacer y lugares para visitar.
Si Tijuana no entra por los ojos, entra por la boca. Restaurantes riquísimos, cervecerías artesanales y pasajes devotos del diseño local forman parte de su propuesta revolucionaria. Se acabaron los días de soñar con San Diego parar volar al norte de Baja California. Aun con sus desprolijos urbanos, hace ya rato que Tijuana es mucho más que un lugar de paso.
Galerías y museos:
CECUT, La Caja y Pasajes
Puede que esta no sea la ciudad más chula del país, pero la cultura se le da rebién y siempre hay cosas que hacer en Tijuana. De entrada hay que hablar del CECUT. Conocido también como La Bola, el Centro Cultural Tijuana combina salas de exposiciones, pantalla IMAX y la primera sede de la Cineteca Nacional fuera de la Ciudad de México. Su Museo de las Californias no es la joya de la corona, pero sus escenarios reciben a bailarines del Bolshoi, a las marionetas de Praga y a Serrat con Sabina.
A los espacios institucionales se suman iniciativas donde ver arte emergente y diseño local. En la colonia 20 de Noviembre, la galería La Caja esconde habitaciones que se transforman en talleres, exposiciones de artistas emergentes y cenas que solo se anuncian de voz en voz. Rehabilitada con sobras de refrigeradores y muelles, esta vieja bodega tiene planes de transformar espacios abandonados de Tijuana con instalaciones de arte.
En la legendaria avenida Revolución, los locales que alguna vez fueron trampas turísticas ahora se lucen. Los pasajes Gómez y Rodríguez ofrecen tiendas y puestos de diseño local, ropa de segunda mano, vinilos y jabones naturales. De hecho, la variedad de productos es tan ecléctica que caben desde antojitos oaxaqueños hasta juguetes de colección.
Restaurantes en Tijuana:
Telefónica Gastro Park, Bajamed y más
La ubicación de Tijuana es estratégica en temas migratorios y económicos, pero también culinarios. A las bondades del Pacífico y la fertilidad de la Baja se suman las tradiciones que llegan del sur y las tendencias que llegan del norte. Gracias a su espíritu emprendedor, sus cocinas propositivas y sus productos frescos, Tijuana es uno de los lugares más ricos para comer en México. Bueno, bonito y, cuando menos en comparación con San Diego, ridículamente barato.
Verde y Crema son adjetivos perfectos para describir una cocina mexicana preocupada por el origen de sus ingredientes. Sin embargo, el nombre de este restaurante en Tijuana es más azaroso. Cuando abrió, el local estaba en un baldío que alguna vez fue un taller camionero, específicamente el de la línea de transportes urbanos y suburbanos Verde y Crema. Ahora en la avenida Revolución, este restaurante sirve esquites ahumados, gorditas de pulpo, grilled cheese de birria y tacos de sirloin con kimchi.
En una línea más o menos parecida, Alma Verde ha plagado la ciudad con restaurantes que ofrecen cocina saludable y opciones veganas. En todas las sucursales, el menú contempla ravioles de betabel con queso de nuez de la inda, pan francés con frutos rojos y chilaquiles con salsas caseras dignas de chupar el plato. La apuesta más reciente de la compañía, AV Rush, es un café pensado para satisfacer antojos y verse bien en Instagram. El menú contempla bowls de coco, donas veganas de rosas y cafés con leche vegana.
En plan rápido y conciliador, Telefónica Gastro Park es el rey de la buena comida rápida en Tijuana. Con más de 15 opciones de restaurantes, este patio de cocinas en la colonia Zona Este combina ramen, costras vegetarianas, ostiones frescos y cheve artesanal. Sin prisas ni formalidades, Oryx Capital y Bajamed (antes La Querencia), son dos embajadores de la aclamada cocina de la Baja. El primero, del chef Ruffo Ibarra, con platos como costilla braseada, pulpo enchilado y tostadas de pato. El segundo, del chef Miguel Ángel Guerrero, creador del concepto bajamed, con platos como chicharrón de pulpo, carpaccio de betabel y carnes del día.
Bares en avenida Revolución:
La Justina, La Mezcalera y Norte Brewing
Los años sin dólares dejaron a Tijuana sin su fiesta habitual, pero no sin fiesta. En lugar de vender alcohol barato en cantidad a morritos menores de 21 años, la ciudad aprendió a diversificar su relación con los tragos. Y sí, quizás el modelo anterior era más rentable, pero sin duda menos presumible. Ahora la pari se arma con cheve artesanal de barril, mixología en serio y destilados que presumen el legado migrante en la esquina de Latinoamérica.
La Revu, como llaman los locales a la avenida Revolución, es el alma de la fiesta. En el gastropub La Justina, tortas de cochinita y hamburguesas de pulpo comparten barra con una señora oferta de tragos. La oferta de mixología incluye mezcal con lavanda y toronja, old fashioned ahumado con madera de cereza y cocteles personalizados. A la vuelta de la esquina, Norte Brewing Co. es una de las razones por las que Tijuana defiende su título de capital mexicana de la cerveza artesanal. Escondido en un quinto piso, este local produce y ofrece variedades como blond ale, cream ale y black ipa con vistas de la frontera y el famoso arco de la ciudad.
A un par de cuadras, sobre la calle Sexta, un espacio meticulosamente kitsch trae al norte las bondades agaveras del sur. Entre vasitos de veladora embriagantes, manteles florales cubiertos de plástico y cuadros de la virgencita con efectos de holograma, La Mezcalera sirve chapulines enchilados y gajos de naranja con mezcales y cremas. Ya entrada la noche, no hace falta más que dar unos pasos para ponerse fiestero. En el patio trasero de la barra mezcalera, La Mija es famosa por su selección de djs y sus noches que se hacen mañanas.
Tips de viaje:
Tijuana recibe vuelos directos de buena parte de México. El centro de Tijuana está a solo 30 kilómetros de San Diego y a 220 kilómetros de Los Ángeles. Eso sí, cruzar la frontera en hora pico puede tomar varias horas.
En Tijuana el transporte público es deficiente. Con planes de explorar sin restricciones, rentar coche es la mejor alternativa. Uber ofrece servicio en la ciudad con precios razonables.
El clima en Tijuana es templado, en especial en comparación con los infiernos de su vecina Mexicali. En invierno la temperatura ronda entre 9 - 20 °C y en verano entre 16 - 26 °C.
Aunque la ciudad está a orillas del Pacífico, Tijuana no es un destino famoso por sus playas. Dicho lo anterior, no está de más visitar el malecón de Playas de Tijuana y dejar un mensaje esperanzador en el muro fronterizo.
La Antigua Bodega de Papel es un foro cultural curado que combina tragos, cerveza y comida para picar con propuestas de música folclórica, poesía, stand up comedy y cabaret.
Curiosidades:
Una vieja leyenda asegura que el nombre de Tijuana viene de una tal tía Juana. A los periódicos les gusta referirse a la ciudad como la esquina de Latinoamérica, pero los locales prefieren Tiyei, en honor a las letras T+J en inglés.
En Tiyei lo mejor es teiquirisi con el inglés. Los tijuanenses van de pari, se dan un shagüer, parquean la picap, se ponen un suera y desayunan confleis aunque sean shocokrispis.
Cuando algo está muy bien o muy bueno en Tijuana, los locales dicen que está curado.
En esta ciudad hay más farmacias que enfermos. Y es que igual muchos gringos se piensan dos veces lo de enfiestar en la Revu, pero dan más miedo los precios de la mafia farmacéutica del otro lado que la fama injusta de Tijuana.
Con papeles casi antagónicos, Tijuana ha servido de musa para varios músicos. Manu Chao la recuerda por sus perdiciones, Juanga la llama mera mera y a Nortec le hace feliz.
PIES DE FOTO
1. El Centro Cultural Tijuana, también conocido como CECUT o La Bola.
2. Chilaquiles de betabel de Alma Verde. Con hambre, uno de los lugares para visitar en Tijuana
3. Mezcal con gajos de naranja en La Mezcalera, cerca de avenida Revolución.
4. Colectivo Fronterizo Radio Guacamaya en Antigua Bodega de Papel de Tijuana.
5. Caminar por el Centro de la ciudad es una de las cosas que hacer en Tijuana.
6. Ostiones frescos en Bajamed, restaurante de Tijuana antes llamado La Querencia.
7. Exterior de la galería La Caja, espacio de arte emergente en Tijuana.
8. Moon milk de matcha, rosas y lavanda en el restaurante AV Rush.
9. Atardecer fronterizo en Playas de Tijuana.
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Publicado el 12 de julio de 2020 por Marck Gutt | Don Viajes.
Última actualización: 17 de junio de 2023.
El contenido de esta publicación es resultado de viajes realizados con el apoyo del Comité de Turismo y Convenciones de Tijuana y de la Secretaría de Turismo de Baja California.
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